Citroën C5 2008

Este año 2008 se puso a la venta el nuevo Citroën C5. "Carácter alemán, espíritu francés". Personalmente es, con mucho, el peor slogan que podía haber hecho alguien por Citroën. Aunque, a lo mejor, la cuestión es que debería de reconocer que Citroën es una marca vulgar y que no tiene un valor propio, por lo que necesita compararse con la élite para intentar hacerse escuchar.
Lo más triste de todo es que eso no es cierto, ya que Citroën ha formado parte de la historia de la automoción desde hace casi un siglo... sin embargo en cierto modo parece que Citroën se quiere empeñar en demostrar que es una marca vulgar. No lo entiendo muy bien, pero es así.
Tras este triste comienzo, hablaremos del nuevo C5 en lo que se refiere al propio coche.

Por fuera
En cuanto al plano estético, este nuevo C5 ha sido bastante alabado en general por los medios de comunicación y por las revistas, hablando de él como "el C5 bonito", en contraposición con las críticas que se habían hecho al primer C5 que se puso a la venta en el año 2001. Personalmente me parece bastante logrado, sin embargo, parece más un Peugeot 407 actualizado que la evolución del Citroën C5, sobre todo desde la caída de la luna trasera. Aún así, también tiene similitudes con el C6, sobre todo la línea de perfil y ese cuasi aire coupé.
Este C5 ha crecido a lo alto y a lo ancho, aunque le han reducido un poco en altura para darle un aire algo más deportivo. Como se puede ver en la tabla siguiente, cada vez los coches son más grandes, aunque parece que poco a poco se están empezando a mantener un poco los tamaños...

Modelo	Largo	Ancho	Alto
Xantia '93	4,44	1,75	1,38
Xantia '97	4,52	1,76	1,40
C5 2001	4,62	1,77	1,57
C5 2005	4,74	1,78	1,48
C5 2008	4,78	1,86	1,45

El chasis de este C5 se basa en el del C6. Esto le ha perjudicado en el peso, pues es un coche más pesado que la media del segmento (entre 1.500 y 1.840kg de peso en vacío según versiones).

Por dentro
El interior de este C5 sí que mantiene un poco más la filosofía Citroën, así como está más cerca de sus hermanos. Por ejemplo, el volante tiene la zona central fija como en el C4. El interior está diseñado en dos colores, siguiendo también la línea de los últimos modelos de Citroën: el cuadro de mandos, volante y guantera en negro y el resto en un color crema más claro. El volante también incluye unos cuantos botones, igual que en el C4, y el Navidrive, tanto la pantalla como la "radio" se mantienen con respecto al C4, C6, e incluso el 407. Cierto es que podrían haber diseñado este módulo de nuevo. El navidrive, aún así, está muy bien integrado.
El salpicadero combina agujas (anulares) con elementos digitales. Todo en la línea de Citroën de ofrecer mucha información al conductor.
El freno de mano es eléctrico y se activa de forma automática al apagar el motor.

Equipamiento y detalles
El Citroën C5 equipa, asociado a los faros bixenon, un sistema que permite el giro de los faros similar al del C4, aunque mejorado. Este sistema funciona muy bien y proporciona una mejora notable en la visibilidad en carreteras de montaña y carreteras sin visibilidad.
También incorpora la alerta de cambio de carril, que hace vibrar el asiento cuando se sobrepasa una línea de la carretera si no se ha accionado el intermitente.
Incorpora también un sistema de memoria de la posición del conductor, que permite memorizar 2 posiciones de los asientos y los retrovisores.
Cuenta con un sistema que mide el espacio disponible para aparcar, indicando si es factible o no hacerlo en el hueco que hay.

Por último, otra de las diferencias en cuanto a la filosofía de la marca, es que se presenta este C5 con una suspensión "metálica" (la suspensión convencional de muelles) como suspensión de partida. Las versiones de gama alta son las que ofrecen la suspensión Hidractiva propia de los modelos grandes de Citroën desde el Tiburón.

Más información
Citroën C5 en km77
Citroën.es

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